La queratosis pilar se caracteriza por la presencia de tapones de queratina en los orificios foliculares y un grado variable de eritema perifolicular. Las formas más leves, que aparecen en la infancia y tienen su máxima expresión en la adolescencia, se consideran fisiológicas, y diferentes estudios estiman la prevalencia de esta entidad en la población escolar entre un 2,7 y un 4%. Es mucho más frecuente en pacientes con dermatitis atópica (un 37% de niños con queratosis pilar referían ese antecedente).
Otras asociaciones comunes son la obesidad y diabetes, síndrome de Noonan, insuficiencia renal, síndrome de Down, síndrome de Graham-Little, displasias ectodérmicas, moniletrix, paquioniquia congénita, etc. El tratamiento con corticoides sistémicos y sales de litio puede inducir estas lesiones. Más recientemente se han descrito numerosos casos de esta entidad en pacientes sometidos a tratamiento con vemurafenib (un inhibidor del BRAF que se utiliza en casos de melanoma metastásico).
Desde el punto de vista clínico se ve como pequeños tapones de queratina blanquecinos o grisáceos obstruyen la salida folicular, dejando atrapado el vello. Las superficies extensoras de los brazos (92%), muslos (59%) y nalgas (30%) se afectan con mayor frecuencia. Es raro, pero pueden verse casos con lesiones generalizadas, así como casos de presentación unilateral. El eritema perifolicular es frecuente.
Respecto a la edad de presentación, el 51% se inician en la primera década, el 35% en la segunda y el 12% en la tercera. Casi la mitad de los casos refieren mejoría durante los meses de verano, y también es habitual que mejoren con la edad (alrededor de los 16 años). El término queratosis rubra pilar se reserva para aquellos casos con un eritema marcado (especialmente en mejillas).
Bueno, parece que no estamos ante nada serio. Pero eso no quiere decir que al paciente no le preocupe. ¿Y qué hay del tratamiento? La hidratación es importante, pero deberemos utilizar cremas con urea (al menos al 10%), ácido láctico o ácido salicílico para obtener algún efecto. Confieso que hasta que no me lo he revisado yo era de las que prohibía tajantemente a mis pacientes usar exfoliantes (guante de crin incluido) pero ahora no lo tengo tan claro. Hay quien dice que puede ser beneficioso, pero como siempre no hay estudios serios que lo avalen. Los retinoides sistémicos no son eficaces (tampoco vería justificado su uso), el calcipotriol tópico parece que no hace nada, y en cuanto al tazaroteno tópico puede ser útil en algunos casos. El componente inflamatorio, cuando exista, puede tratarse con tandas cortas de corticoides tópicos de potencia media.
A Pilar le recomendamos una crema hidratante con ácido láctico, le dijimos que no se pasara con el guante de crin y lo cierto es que no ha mejorado demasiado. Confiamos en que la naturaleza haga su trabajo y mejore en unos pocos años.
¿Sabéis lo que es el efecto Bokeh en fotografía? Pues echad un vistazo al siguiente vídeo.
暈け Bohehxplosions from Stanislas Giroux on Vimeo.