Flor había superado un cáncer de endometrio hacía ya 10 años
y la hipertensión arterial la mantenía a raya con enalapril y una dieta con
poquita sal. Pero cuando se creía que la artrosis era su principal problema de
salud le aparecieron unas manchas marrones en la parte baja de la espalda que
le picaban muchísimo. Su medicación era la de siempre y no lo relacionaba con
nada, así que su médico la remitió a la consulta de dermatología, donde la
citaron pocas semanas más tarde.
Cuando visitamos a Flor, de 59 años, las lesiones ya llevaban un mes y medio y, aunque le habían recetado un antihistamínico, el picor era intenso, dificultándole incluso el descanso nocturno. El resto de la piel no tenía nada raro, incluidas las palmas, plantas y las mucosas. Ahora nos toca a nosotros. ¿Qué hacemos? ¿Biopsia o nos atrevemos con un diagnóstico? ¿Y el picor? ¿Cómo lo hacemos para que Flor pueda volver a dormir por las noches? El miércoles volveremos por aquí a explicaros el desenlace.
THAILAND - In the Garden of the Dragon from Justin Heaney on Vimeo.
Hola, cambiaria el enalapril por otro hipotensor. No nos dicen el tratamiento que llevo por su neo endometrial; quizas fuera radiada y hayan salido estas lesiones residuales...biopsia porfa.
ResponderEliminarLiquen?
ResponderEliminarLP pigmentoso
ResponderEliminarOD: mastocitosis cutánea(urticaria pigmentosa) vs liquen amiloide. Sí que realizaría biopsia de la lesión, y para el picor a parte de antihistamínicos iniciaría corticoide tópico.
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